martes, 29 de junio de 2010

Fenomenos inexplicables

Para poder explicar un poco la historia que tengo en mente desde hace unos días, pasare por situar un poco mis cambios de ciudades desde que me fui de mi casa.



Cuando acabe la carrera tenia claro que lo primero que tenia que hacer era asegurarme la plaza. Después pediría un traslado, primer destino Tenerife, de allí a Málaga y Torremolinos, hasta que por cosas del destino acabe en Gijon.


No soy miedosa, para nada, de hecho jamas he cerrado una casa por dentro, bueno ahora no me queda mas remedio desde que descubrí que Dani podía abrir la puerta.


A lo que voy. En Tenerife, (como en casi todas las ciudades), vivi en dos apartamentos. En el primero estuve poco tiempo, no me gustan los espacios pequeños, así que me mude a otro un poco mas amplio. Allí empezaron a pasar cosas que nunca entendí.


Yo vivía con una compañera, pero apenas coincidíamos por el tema de los turnos. Pero en mas de una ocasión viendo del baño a la cocina note como me tocaban en el hombro, y me volvía, hasta que me daba cuenta de que estaba sola en casa, (siempre pensaba, serás tonta), y seguía riendome cuando me daba cuenta que realmente estaba sola en casa. Eso se repitió en numerosas ocasiones.


Otra cosa que se repetía con cierta frecuencia era oír "Rosa", y por también me volvía, hasta que me volvía a dar cuenta que estaba sola.


En una ocasión, me fui a trabajar y al llegar tuve la sensación de haberme dejado el gas de la cocina encendido, así que llegue y dije que me volvía a casa, que volvía en media hora, que era lo que tardaba entre ir y volver. Para mi sorpresa me encontré con la puerta de mi casa abierta y de que la había cerrado con llave estaba bien segura, es mas repase todos los pasos desde que abrí la puerta, la cocina estaba apagada. No me dio miedo. Cosa que ahora me daría de todo! (Esto solo sucedió en aquella ocasión).


Esas dos situaciones se repitieron muchas veces en los mas de dos años que vivi en ese apartamento, y a estas alturas recuerdo la voz que me llamaba "Rosa", pero no tengo ni idea de porque pasaba eso.


De allí a Málaga, también vivi en dos pisos, pero nunca paso nada de eso, ni en el de Torremolinos.


Conozco al que hoy es mi marido y durante un tiempo vivimos en el piso que tenia el, justo en la calle paralela a donde vivimos hoy.


Este es un piso que estrenamos nosotros, y aquí vuelven a pasar cosas extrañas, pero esta vez no soy yo sola la que las siente.


Estar en el salón o en el despacho que están en la planta baja y volverme hacia la puerta como si viera pasar a alguien, notar perfectamente como giran las llaves en la puerta de entrada, oír como baja alguien por la escalera, (en muchas ocasiones no hay nadie arriba). Tener la sensación de que tengo los ojos de alguien clavados en la nuca y volverme. Cuando aun no había nacido el niño, tener la sensación de no estar sola, aunque Jose estuviera trabajando y no ser hora de su vuelta a casa. (No se si se me olvida alguna de las cosas que vivo de vez en cuando aquí).


Hablando con mi marido el aparte de eso comenta el haber sentido una corriente de aire frío a sus espaldas aun estando todas las ventanas cerradas. (Yo eso no).


El niño ha salido corriendo mas de una vez a la puerta gritando, "papa, papa..." y coincidir con que yo había oído las llaves girar, y no ser hora de que el volviera del trabajo. O estar jugando y ver como el también giraba la cabeza hacia la puerta.


El es muy pequeño para comentar nada, pero todos en casa hemos notado las mismas cosas... que pasa? Ni idea... pero algo debe de haber cuando los tres tenemos las mismas sensaciones, y muchas veces coinciden.


A mi la ultima fue ayer. Como normalmente me levanto muy temprano, y a Dani ya no le ponemos escucha, siempre tengo la puerta del despacho abierta, como ahora, por si baja, o llama. Esa en el WC que esta dentro del despacho, y oí perfectamente unos pasos bajando por la escalera, no estaba segura si eran los del padre o los del niño. Aquí todo el mundo baja muy sigiloso cuando hay alguien durmiendo.


Cuando salí me extraño que nadie hubiera asomado por aquí... fui a la cocina, por si el que fuera se hubiera ido allí directamente y seguía yo sola en la planta de abajo... ellos dos dormían.


Hay temporadas que no se nota nada, y otras que con frecuencia parece que hubiera alguien mas en casa...


Explicación ninguna....
 
Besos
 
Rosa

13 comentarios:

I need a miracle dijo...

Ainsss, Rosa.

Que me da yuyu estas cosas, y ahora que "para variar" estoy sola en la oficina no hago nada más que mirar para todos lados...

No sentís miedo, ni escalofríos? Lo curioso es que no es una casa antigua, que dicen que en estas es normal que se escuchen muchos ruidos o crujidos.

Besos

Luna dijo...

Buenas Sieslo.
La verdad que alguna ez que lo comentamos, lo llevamos con toda la tranquilidad del mundo.
Dani tampoco dice nada, y con el no se comenta, nu cuando esta delante, porque es un poco miedoso con el tema de los ruidos.
Pero como ruidos no se oyen, ajajajajaa.
Como veras no me aburro!
Besos
Rosa

juanjo dijo...

No puedo darte una explicacion "cientifica" sin estar ·sobre el terreno".Lo primero que se me ocurre es atribuirlo a tu autosugestion,ruidos que proceden de otros pisos pero que parecen sentirse mas cerca.
Lo de oir tu nombre tiene un termino cientifico....yo lo he experimentado en ocasiones en plena calle....se trata de una simple alucinacion auditiva (que tambien existen aunque solemos identificar las alucinaciones con las visuales) que es completamente normal.
No obstante reconozco que la historia es inquietante
Besos

Papalobo dijo...

tu caso me suena al del chino ese que tuvo a una señora escondida en su armario un montón de días sin darse cuenta. ¿has mirado a ver si tienes un par de orientales en casa?¿Te falta arroz? jijiji

Luna dijo...

Buenas Juanjo.
Lo de la autosugestion, me extraña un poco, dado que soy mucho peor que santo Tomas que veo y aun a veces no creo...
Lo que paso en la casa de Tenerife bueno alli nunca lo comente con la que vivia conmigo...
Pero que Dani salga a buscar a su padre, o se vuelva a mirar hacia la puerta, cuando estamos solos en casa!
Los ruidos de los otros pisos dada la extraña distribucion de este edificio...
De todas formas sea lo que sea no me preocupa, nosotros lo consideramos curioso, simplemente.
Un millon de gracias por tu explicacion.
Espero a ver con que me sorprendes en tu proxima entrada.
Besos
Rosa

Luna dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Luna dijo...

Buenas Papalobo.
Esconder un chino, ni nada en los armarios de esta casa... esta dificil... para empezar tengo que empezar por sacar cosas que se van acumulando y no se usan...
Yo suelo decir que soy de las que guardo hasta los mocos, ajajajajaj
Un dia de estos empiezo a hacer sitio...
Besos
Rosa

Treintañera con hijo dijo...

Cuando me case estuvimos viviendo de alquiler dos años y aquel piso a mi me daba un poco de yuyo porque pasaba lo que a vosotros. La tele y el aire acondicionado se encendian solos, cuando estabas en la cama parecia que se sentaba alguien en ella.... la verdad que me alegre un montón cuando nos fuimos de allí.

Luna dijo...

Buenas Treintañera.
La verdad que a nosotros no nos incomoda la situacion.
Pero de momento no se conectan los aparatos solos.
Y esa sensacion solo es la planta de abajo, en los dormitorios que estan arriba, yo nunca note nada.
Como mucho la lluvia o el granizo en el crital, que esta en el tejado, y eso si es molesto a veces.
Besos

Rosa

pulguitaatodogas dijo...

De vuelta a la blogosfera me he puesto al día de las experiencias extrasensoriales que has tenido (y del cumple de tu osito con corona de rey).
Te cuento: nos dejaron un viejo pazo en Galicia para pasar un fin de semana largo: por la noche escuchamos (¡todos!) un teléfono en una casa que no tenía línea, oimos una radio que nadie encendió y había una puerta cerrada que los dueños nos aseguraron después que no tenía cerradura (se me pone la piel de gallina al recordarlo).
No es que me crea lo del sexto sentido, pero es verdad que a veces ocurren cosas que no tienen explicación... y que hacen de nuestra vida algo especial... ahora mismo, delante del teclado siento clavada una mirada en mi espalda; la ventana está abierta, pero se que a estas horas todo el pueblo duerme... un susurro, ¿o es el ruido de arrastrar los pies? rasga el silencio solo roto por el monótono cliquear del teclado... y una mano, fría como el hielo, se apoya en mi hombro... no me atrevo a mirar hacia atrás y sigo escribiendo como si nada pasara, pero siento como los dedos se van apretando en mi piel: son duros y finos, pero lo que más me llama la atención es que están fríos... casi cuando empiezo a sentir dolor aflojan la tansión y desaparece el contacto... me miro el hombro y ahí esta la marca clara de los cinco dedos... sigo sin atreverme a girar la cabeza y creo que no he vuelto a escuchar el ruido de los pies marchándose... ¿estará detrás mío?, ¿me estará mirando?... cuando dejo de teclear el silencio hace daño... una ráfaga de aire agita los papeles que tengo en la mesa y al torcer un poco la cara veo de reojo en el cristal de la venta mi imagen reflejada y detrás... detrás... está detrás, tiene los brazos levantados hacia mí y algo que no distingo en la mano, ¿que es?... ¿qué es, Dios mío?... oh, no, es una

Luna dijo...

Buenas Pulguita.
Bienvenido de vuelta!
Los pelos como escarpias... eso que si que me ha dado pelin de repelus, jajjaajajaj.
Lo de la mano fria en el hombro...
Eres pero que yo...jajajajaja
Besos
Rosa

Lenka dijo...

Hola, Luna!!! Chica, tenéis un duende en casa. Y encima lo notáis, así que o sois muy sensibles, o él es un descarao o ambas cosas!!! ;)

Hay cosas que no se pueden explicar (al menos todavía) pero soy de las que piensa que no hay por qué temerlas. Siempre pongo el mismo ejemplo tonto: hace siglos la gente se moría de miedo con los eclipses y hoy día sabemos perfectamente lo que son y hasta los disfrutamos como todo un acontecimiento. Me parece muy sensato que os lo toméis con naturalidad.

A mucha gente nos han pasado cosas "curiosas" (y a veces directamente pelopúnticas!!) pero aquí estamos para contarlo entre cafés, caras de susto y risitas. También es verdad que yo para esto soy tremendamente tranquila. Si se puede explicar racionalmente, perfecto. Si no... pues nada. No nos molestamos y punto. Como sabiamente decía mi bisabuela: "miedo a los fantasmas?? Miedo a los vivos, que son los que te las arman!!!"
;)

Luna dijo...

Buenas vecina!
Llevo unos dias, entre liada y medio cansada.
Pues no se me habia pasado este comentario tuyo... cachis!!!!!

Totalmente de acuerdo con tu bisabuela, sabia mujer! Como su bisnieta!

Estoy como perezosa con el teclado y tendria varias cosas que contar...a ver si ya me animo.

De vacaciones?
Besos
Rosa